El mundo está cambiando y de forma acelerada. Día a día nos damos cuenta de noticias que los precios de los combustibles suben y que por momentos bajan, pero todo parece indicar que el costo de los hidrocarburos de un momento a otro irá en ascenso.
Ante un panorama cada vez más incierto sobre el precio que podrían alcanzar en un futuro cercano los combustibles por situaciones que se ven reflejadas en noticias del ámbito internacional, y que las economías de los países están resintiendo, el costo de la energía eléctrica podría también verse afectado.
Semana a semana nos damos cuenta cómo los precios de los combustibles varían de forma constante y más recientemente muestran un comportamiento hacia el alza, derivado del costo del precio del barril de crudo. Ante esta situación puede surgir la pregunta ¿En qué afecta el costo de los combustibles en el precio de la energía eléctrica?,¿Qué relación hay entre una cosa y la otra?
Esta interrogante puede tener varias respuestas. En primer lugar, podemos decir que afecta en mucho. Actualmente más del 20% de energía eléctrica de El Salvador es generada mediante el uso de combustible bunker, según datos del Consejo Nacional de Energía (CNE)*. Por lo tanto, en la medida que el precio de combustible aumenta, el costo de generación también se incrementa, lo cual tiene incidencia en la tarifa del consumidor final.
Por otra parte, hay que tener en cuenta que los altos costos de los combustibles tienden a ser trasladados por las empresas en la cadena de suministros lo cual ocasiona que el precio de los productos se incremente y el más afectado resulta ser el consumidor.
Si, por un lado, la volatibilidad de los precios de los combustibles es difícil de controlar de forma permanente, las empresas y la población pueden adoptar medidas que les permitan disminuir o mermar estos impactos a fin de evitar cuidar sus economías. Una de estas medidas de cara al futuro sin lugar a dudas es la adopción de los sistemas solares de generación de energía eléctrica, conocidos también como sistemas fotovoltaicos, los cuales permiten generar energía limpia y reducir la factura eléctrica.
En ese sentido, las empresas y los usuarios residenciales tienen a la vista una oportunidad valiosa para invertir de cara al futuro en los sistemas, fotovoltaicos porque la reducción de la factura eléctrica representa un beneficio para la economía, a diferencia de continuar consumiendo sin la adopción de medidas reales que reflejen una disminución en los costos por recibir el servicio de electricidad.
Según las estadísticas del CNE, del 18 de abril de 2022, sólo el 9.71% de la matriz energética es generada por sistemas solares fotovoltaicos o paneles solares.
Es importante tener en cuenta que los subsidios no pueden durar para siempre porque representan un alto costo para el Estado, es por ello que los usuarios deben buscar la manera de cómo economizar y reducir esa carga estatal, haciendo uso eficiente de los recursos naturales y buscando siempre la protección del ambiente.