Cristina Morataya
Directora General de Vekpower
Doctorado en la línea de Investigación Diplomacia Azul y Economía Circular de la Universidad Politécnica de Madrid
El 2025 está a la vuelta de la esquina, y las empresas que miran hacia el futuro están adoptando prácticas sostenibles no solo como una respuesta a los retos ambientales, sino como una oportunidad para innovar y liderar en sus sectores. Cada vez es más común la toma de decisiones responsables para alcanzar la sostenibilidad empresarial.
Más allá de ser una tendencia, la sostenibilidad es una estrategia de largo plazo que genera valor económico, ambiental y social, es evidente que, su búsqueda, debe estar conformada por equipos multidisciplinarios que permitan ampliar el panorama de las posibles acciones a tomar para este 2025.
¿Por qué apostar por la sostenibilidad ahora?
La urgencia climática, es decir, la triple crisis planetaria que enfrentamos, en el que, la pérdida de la biodiversidad, la contaminación ambiental y el cambio climático, se encuentran en cifras sin precedentes, esto obliga a las regulaciones más estrictas y el cambio en las expectativas de los consumidores han colocado a la sostenibilidad en el centro de las estrategias empresariales. Las empresas que actúan ahora están mejor posicionadas para ser líderes en sus industrias.
Aquí les dejo algunas de estas prácticas que, en entradas anteriores ya les he mencionado, no está de más recordarlas, pero, sobre todo, aplicarlas para 2025.
Sistemas solares fotovoltaicos: una solución imprescindible
La transición hacia energías renovables no es solo un compromiso con el planeta, sino también una estrategia para reducir costos operativos y aumentar la resiliencia empresarial. Los sistemas solares fotovoltaicos permiten a las empresas disminuir su dependencia de fuentes tradicionales, estabilizar costos energéticos y, al mismo tiempo, mejorar su reputación. En Vekpower, estamos innovando las propuestas con los Sistemas Aislados Asistidos por la Red que están siendo una solución muy factible.
Otras prácticas sostenibles para innovar en 2025
- Eficiencia energética: Implementar tecnologías inteligentes para optimizar el consumo de energía.
- Economía circular: Rediseñar productos y procesos para reducir desperdicios y promover el reciclaje.
- Transporte sostenible: Migrar hacia flotas eléctricas y fomentar el teletrabajo o la movilidad compartida.
- Certificaciones verdes: Obtener certificaciones como ISO 14001 o LEED para posicionar a la empresa como líder en sostenibilidad, entre otras.
Beneficios concretos de la sostenibilidad empresarial
Muchos empresarios me consultan ¿qué beneficios concretos puedo obtener con la implementación de las prácticas sostenibles en mi empresa? Existen múltiples ventajas, a veces lo que ocurre es que, a nivel tangible no siempre puede evidenciarse, a veces, es mucho más fácil medir resultados a través de equipos encargados del crecimiento sostenible empresarial y que, por medio de registro de datos, puedan documentar y evidenciar los resultados de las buenas prácticas empleadas.
- Incremento de la rentabilidad al reducir costos operativos.
- Mayor atractivo para consumidores conscientes y socios estratégicos.
- Acceso a incentivos fiscales y financieros relacionados con iniciativas verdes.
El futuro pertenece a las empresas que son audaces y responsables. Innovar en 2025 significa adoptar prácticas sostenibles que impulsen el cambio positivo, tanto para la sociedad como para el planeta. Invertir en sistemas solares fotovoltaicos y en otras estrategias sostenibles no solo es una decisión inteligente, sino también una forma de liderar el camino hacia un futuro más verde.
«El momento de innovar con propósito es ahora. ¿Qué práctica sostenible implementará tu empresa para marcar la diferencia en 2025?»